Quien dice cuenta corriente, dice tarjeta de crédito o débito… Aún así, en muchos bancos tradicionales, conseguir una tarjeta suele llevar mucho más tiempo del que querríamos.
Hay que llamar a nuestro banquero, hacer una solicitud para pedir una tarjeta nueva, firmar el contrato y esperar a que se valide o se trate la petición. Y luego hay que volver a llamar al banquero, preguntar si el proceso ha avanzado y seguir esperando.
En Qonto, todo este papeleo y las consiguientes llamadas se ha reemplazado por un proceso con varias etapas directamente integrado a la aplicación. ¿Quieres ver cómo funciona? 👇
Elige entre tarjeta física o tarjeta virtual
Lo primero que tendrás que hacer será elegir una tarjeta física o una tarjeta virtual.
Aunque no estemos acostumbrados, hoy en día ya no hace falta esperar a que nos llegue nuestra tarjeta para poder empezar a disfrutarla. Se puede crear una tarjeta virtual casi instantáneamente, y acto seguido empezar a hacer compras en internet. Este tipo de tarjeta es también una forma de dar flexibilidad y autonomía a tus empleados (mientras tú, como administrador, controlas las finanzas de la empresa).
O al revés, si necesitas un instrumento de pago que vayas a usar en el día a día, no hay nada como la tarjeta física tradicional. Tendrás que esperar unos días, pero en cuanto la recibas la podrás utilizar en todo tipo de situaciones. Además, si optas por una tarjeta física, tendrás la gran ventaja de poder elegir entre una tarjeta One, Plus o X.
One, Plus, X: selecciona la tarjeta que se adapte a tu ritmo de crecimiento
En función de tu tipo de actividad, del tamaño de la empresa o del sector, los gastos no son los mismos. Y tu tarjeta, tampoco.
Si no sueles salir del territorio nacional, la tarjeta One será más que suficiente (puedes gastar hasta 20 000 € al mes). Pero si, por ejemplo, compras material de forma regular, puede que la tarjeta Plus te venga mejor (se puede pagar hasta 2 veces más). Pero la diferencia no está solo en los límites te pago... puedes leer otros artículos de nuestro blog, donde te explicamos cómo elegir entre las dos tarjetas.
La tarjeta X es un tema aparte. No tiene comisiones por cambio de divisa y permite acceder a las salas VIP de los aeropuertos, así que es perfecta para aquellos empresarios que viajen al extranjero. Además su material y su aspecto exterior tan particular seducirán a los amantes del diseño. Si tú eres uno de ellos, este artículo te puede interesar.
☝ ️Encontrarás toda la información en la aplicación. Después de haberla elegido, podrás adaptar la tarjeta, aún más, a las necesidades de tu empresa.
Adapta la tarjeta a tu actividad
Todas las opciones de la tarjeta (o casi todas) pueden configurarse según las necesidades de tu empresa.
Por un lado, tendrás que decidir a quién se la asignas, porque tú no eres el único que puede ser titular de una tarjeta. En teoría, cualquier miembro de tu equipo puede tener una, e incluso varias. La única condición es que el propietario de la tarjeta tenga un acceso a la cuenta Qonto.
Ten en cuenta que el hecho de tener acceso a una cuenta Qonto no significa tener acceso a toda la información ni a la gestión de las finanzas. Hay varios tipos de accesos o usuarios.
Luego, podrás activar o desactivar las distintas funcionalidades de la tarjeta; retiro de efectivo, pagos sin contacto, compras online e incluso pagos en el extranjero. Si crees que no se va a hacer uso de alguna de estas opciones, puedes desactivarla para proteger tu cuenta (podrás volver a activarla más adelante).
Por último, toca definir los límites de pago y retirada de efectivo. Mientras no excedan el límite máximo permitido por la tarjeta, podrás fijar el importe que quieras. El objetivo es poder mantener el control sobre los gastos pagados con esa tarjeta, aunque tú no seas el titular.
Y ya está. Tu tarjeta está lista. ¿Dónde te la enviamos?
Escoge una dirección de envío
En casa, en la oficina o en cualquier otro sitio. Tú decides dónde.
En cualquier caso, te indicaremos la fecha de la entrega (como en la imagen de arriba ☝️). Así no tendrás que estar pendiente de cuándo llega el repartidor.
Los plazos de entrega varían de una tarjeta a otra. En general, una tarjeta One o Plus llega en 5 días. La tarjeta X es aún más rápida y llega en 2 días. Las dos primeras las podrás recoger en tu buzón de correos, mientras que la X se entrega directamente en mano.
Nota: Te recordamos que, para casos urgentes (o en general), nuestra tarjeta más rápida es la virtual. En cuanto confirmes el pedido, la tendrás disponible en la app.
La tarjeta físicas Qonto tarda varios días en llegar, pero tú solo tardarás unos minutos en pedirla. Puedes escribirnos a través de nuestro chat (disponible en la web de Qonto) si tienes alguna duda o comentario al respecto; ¡estaremos encantados de leerte!