Guía para crear tu empresa online
Emprende con éxito y conoce toda la documentación necesaria, los costes finales y las reducciones fiscales disponibles para crear tu empresa.
Muchas personas tienen grandes ideas de negocio, pero se resisten a emprender por falta de recursos. Otras sí ponen en marcha su empresa, pero abandonan su sueño cuando los gastos comienzan a multiplicarse y las ganancias tardan en llegar.
Si estás pensando en emprender un negocio, pero temes fracasar en el intento, existe un servicio que seguramente despertará tu interés: los viveros de empresas. Veamos en qué consisten y de que forma pueden darte el apoyo que necesitas para hacer realidad tu proyecto.
¿Qué es un vivero de empresas?
También conocidos como incubadoras de empresas o de negocios, los viveros empresariales se pueden describir como despachos que ofrecen todo lo necesario para que los nuevos empresarios obtengan acceso los servicios básicos que les permitan dar inicio cuanto antes a su actividad comercial, así como despegar y consolidarse. Son iniciativas impulsadas por diversas instituciones públicas y privadas.
Los beneficiarios reciben un apoyo integral a precios asequibles, que consiste en mobiliario básico, y servicios de limpieza, mantenimiento, recepción, seguridad, vigilancia, agua, luz, teléfono, internet y climatización. También tendrás acceso a cualquier zona común del vivero, y a las salas multifuncionales y de juntas.
Ventajas de la incubadora de empresas
Si no fuera por la ayuda de los viveros, es probable que muchas pymes que ahora están plenamente integradas al mercado español ni siquiera hubieran nacido. Según un estudio efectuado por la Fundación de Cajas de Ahorro, entre el 70 y el 90 % de las nuevas empresas continúan su actividad tras finalizar su estadía en el vivero.
Desde el primer día que el emprendedor se instale, dispondrá de todo lo necesario para la gestión de su negocio. Esto le permitirá consolidarse más pronto que si iniciara su actividad por su cuenta.
Otra ventaja única tiene que ver con la dinámica de trabajo que reina en las incubadoras de negocios. Tendrás contacto estrecho con otros emprendedores, conocerás sus ideas y crearás una red de coworking. Así que los beneficios van mucho más allá de las relaciones sociales.
Al mismo tiempo, disfrutarás de prestaciones que te ayudarán a acelerar el desarrollo de tu negocio y mejorar en muchos aspectos. Estos incluyen asesoramiento e información legal para que tu empresa pueda incursionar en los mercados internacionales (por ejemplo, con la ayuda de una plataforma digital que te permita el comercio de tus productos), facilidades para obtener financiación, formación empresarial y dirección por parte de consultores.
Ser un viverista es muy distinto de ser un emprendedor en solitario que solo se comunica con sus colegas a través de las redes sociales o el email desde la privacidad de su hogar. En todo momento, estarás al tanto de las noticias sobre diferentes eventos relacionados con el mundo del emprendimiento, lo que te ayudará a ampliar tus redes de contactos, y hacer networking y promoción de tu empresa.
Requisitos de los viveros
El vivero tiene un coste mensual mucho más reducido que el de los espacios de oficina convencionales. Para calcularlo, se le asigna un precio fijo al metro cuadrado y se multiplica por la superficie ocupada por la nueva empresa.
El importe se mantiene sin cambios durante los primeros doce meses. Cumplido dicho plazo, el valor se incrementa. Generalmente, si la mayoría de los emprendedores son mujeres, se aplica un descuento del 20 %.
¿Cómo integrarse a una incubadora de empresas?
Si quieres ser parte de un vivero necesitas enviar una solicitud, sea en línea (por ejemplo, a través de la ventanilla de atención al emprendedor, del Ayuntamiento de Madrid) por correo electrónico o de forma presencial, y presentar la documentación requerida.
Se le dará preferencia a los emprendedores cuyo programa destaque por su innovación o por su enfoque social, y que tengan un plan de empresa que se distinga por su viabilidad económica y financiera.
Además, las empresas solicitantes deben ser pymes con menos de cinco años de antigüedad, y que se comprometan a iniciar su actividad en el lapso de los 30 días naturales posteriores al aviso de autorización para usar el despacho.
Una política más tiene que ver con la actividad a desarrollar. Esta debe pertenecer a la industria de los servicios, y no causar perjuicios a terceros ni al medio ambiente.
¿Cuánto tiempo puedes prolongar tu estancia en el vivero de empresas?
La mayoría de las incubadoras de negocios establece dos o tres años como plazo máximo para permanecer con ellos.
Se supone que, dentro de ese lapso, el emprendedor habrá adquirido la suficiente solvencia, rentabilidad y experiencia para comenzar a operar desde sus propios locales.
La cuenta de empresa online ideal para el proceso de creación de un nuevo negocio.
¿Dónde puedes encontrar un vivero en España?
La Fundación INCYDE, bajo la supervisión de la Cámara de Comercio, lleva poco más de dos décadas fomentando el emprendimiento mediante la creación de incubadoras de empresas en el territorio nacional.
Actualmente, administra una red de viveros (más de ciento treinta) distribuidos por todo el mapa, con espacio para más de mil seiscientas oficinas. Madrid cuenta con seis: los de Carabanchel, Moratalaz, Puente de Vallecas, San Blas, Vicálvaro y Villaverde. Puedes obtener más información sobre los servicios que ofrecen en la Ventanilla Única del Emprendedor.
Se calcula que, hasta el día de hoy, estas ayudas de la Cámara han beneficiado a casi tres mil empresas, mismas que le han dado empleo a más de seis mil quinientas personas.