Puede que te estés planteando cómo iniciar un negocio y que para ver la viabilidad de tu proyecto quieras tener claro el gasto mensual al que te vas a enfrentar en el transcurso de tu actividad profesional. En anteriores entradas ya hemos hablado sobre los requisitos exigidos para darte de alta como autónomo, hoy vamos a dar un paso más allá: ¿qué gastos debe soportar todos los meses un profesional o trabajador por cuenta propia en el desarrollo de la actividad de su empresa?
¿Cómo repercute económicamente el alta de autónomo
En nuestro país para ser autónomo hay que inscribirse en el censo de empresas de Hacienda y presentar el modelo TA 0521 en la Seguridad Social y es totalmente gratis. No obstante, la complejidad de la gestión para darse de alta en el régimen para trabajadores autónomos en España suele confundir a muchos emprendedores. Esta circunstancia obliga, por seguridad en el correcto proceso burocrático, a recurrir a los servicios de una asesoría especializada.
Para darte de alta tienes dos opciones, realizar tu mismo la gestión o pagar por los servicios de una asesoría profesional que la realice por ti. Si decides realizar el alta por ti mismo, no olvides que Internet es el medio por el que lo puedes hacer ya que esta gestión se puede realizar por vía electrónica.
Independientemente de la facturación que se genere en la actividad de tu empresa, la cuota a la Seguridad Social es un gasto fijo al que todos los autónomos tienen que hacer frente todos los meses:
- Tarifa plana S. Social: 60 euros los 12 primeros meses, 141,65 euros del 13º al 18º mes y 198,31 euros del 19º al 24º mes.
- Autónomo sin bonificaciones: cuota mínima de S. Social de 283,3 euros al mes.
- Autónomo societario o con empleados: cuota mínima S. Social de 364,23 euros al mes.
Estos trámites también puedes hacerlos a través de Internet.
¿Qué obligaciones fiscales tienen los autónomos?
El pago de los impuestos es un capítulo que ningún autónomo debe descuidar ya que su incumplimiento puede conllevar graves sanciones económicas para tu negocio.
IRPF autónomos (IPF)
El IRPF (IPF)es un impuesto que hay que liquidar y pagar trimestralmente. Si vas a tributar en estimación directa es necesario presentar el modelo 130, las retenciones están sujeta a diferentes porcentajes:
- Ser autónomo profesional con menos de 3 años de antigüedad: 7%.
- Ser autónomo profesional con más de 3 años de antigüedad: 15%.
- Ser trabajador autónomo no profesional: 20%.
¿Cómo calcular el IRPF?
Para conocer con seguridad el IRPF solo tienes que seguir la siguiente fórmula:
- IRPF (IPF) a pagar = (Ingresos – gastos) x retención correspondiente
Conviene tener claro que en esta fórmula los ingresos y gastos no incluyen el IVA. Para realizar el cálculo correctamente de estos impuestos debes coger la base imponible de tu facturación sin IVA y restarle los gastos, también sin IVA. Es importante que tengas en cuenta que si más del 70% de tus ingresos tienen retención no estás obligado a hacer la declaración del IRPF cada tres meses.
Si tu caso es que vas a tributar en estimación objetiva, el modelo que tendrás que presentar es el 131 y la cuota dependerá de los módulos previstos para el modelo de negocio en el que vayas a darte de alta.
IVA autónomos
El IVA es uno de los impuestos más importante al que la mayoría de las empresas debe hacer frente. Normalmente, los autónomos tributan por el IVA general que es del 21%. Al igual que el IRPF, el pago se realiza trimestralmente y para ello debes cumplimentar el modelo 303.
¿Qué otros impuestos son habituales?
Puedes tener la necesidad de un local u oficina para que tu empresa pueda ejercer su actividad. En este caso, también tendrás que soportar algún tipo de impuesto local como el IBI. Las empresas que usen vehículos para el desarrollo de su trabajo también se verán en la obligatoriedad del pago del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM). Cada uno de este tipo de impuesto local hay que tramitarlo y tributarlo en el municipio donde la empresa esté registrada.
¿Qué gasto mensual variable afecta al autónomo?
Las pymes (cualquier tipo), según sus necesidades, pueden contar con un determinado tipo de servicios a los que tendrá que hacer frente económicamente. Los más habituales son:
- Compra de productos o materias primas.
- Suministros de agua, luz, teléfono, internet o material de oficina.
- Alquiler del local comercial o almacén
- Arrendamientos financieros para vehículos, equipos informáticos, etc.
- Servicios externos: gestoría, publicidad, alojamiento web, mantenimiento o seguros.
- Gastos financieros: cuotas de préstamos, intereses y comisiones por mantenimiento de cuenta, uso de TPV o tarjetas.
El caso es que para saber con total seguridad que tu negocio te va a permitir vivir de él, las facturas profesionales mensuales deben de cubrir sobradamente todos estos gastos.