Comercio
El comercio es tan antiguo como el ser humano y, de hecho, muchos dirán que es precisamente una de las actividades que separan al ser humano de los animales. Pero, a la hora de la verdad, el comercio es un concepto complejo que merece ser tenido en cuenta en toda su profundidad.
El comercio es un término que se usa para referirse al intercambio de bienes o servicios entre personas, empresas o países. En el ámbito estrictamente económico, el comercio implica una acción de compra, venta o intercambio de productos o servicios con la finalidad de obtener beneficios.
Todo comercio supone la existencia de dos partes que llevan a cabo el intercambio de bienes o servicios: el ofertante o vendedor y el consumidor o comprador. Además, este intercambio siempre tiene lugar en el mercado económico, independientemente de que este espacio sea físico (es decir: en tiendas o establecimientos físicos) o virtual (en portales de comercio electrónico).
Es necesario puntualizar que el comercio es una actividad perteneciente al sector económico terciario, que es aquel destinado a la satisfacción de las necesidades de los consumidores finales, empresas o industrias. Este sector, además del comercio, incluye otros subsectores como las comunicaciones, los centros de llamadas, las finanzas, el turismo, la hostelería, el ocio, la cultura, los espectáculos, la administración pública y los servicios públicos.
Pequeña historia del comercio
Existe constancia de la existencia del comercio desde los inicios de la civilización. Las primeras sociedades agrícolas y sedentarias ya lo practicaban en el Neolítico, entre los años 8000 y 5000 a.C. El cultivo de alimentos permitió al ser humano dejar atrás la vida nómada y asentarse en poblados con un estilo de vida sedentario.
La expansión de estas poblaciones humanas fue paralelo a la expansión de las tierras cultivadas y la cría de animales, lo que implicaba un excedente de producción que se intercambiaba con los asentamientos cercanos. Estas primeras actividades comerciales tomaron la forma de trueque: un intercambio directo de una mercancía por otra de igual valor.
En torno al siglo VI a.C., la creación de la moneda como método de pago impulsó el comercio hacia nuevas mecánicas. Al fin y al cabo, esta nueva práctica permitía una equivalencia entre el valor de la mercancía y el de la moneda, normalmente elaborada en metales como el oro o el bronce.
La historia del comercio ha vivido otras revoluciones posteriores, tal y como la fundación de los primeros bancos en la Edad Media o la invención de la máquina de vapor y el ferrocarril en el siglo XIX. Esta última revolución permitió acortar distancias a la hora de comerciar.
De hecho, a día de hoy, puede decirse que para el comercio ya no existen ni distancias ni fronteras (a excepción de las escasas economías cerradas que existen internacionalmente). Actualmente, además, los intercambios ya no se limitan a la moneda, sino que han incorporado nuevos métodos de pago como la moneda virtual.
Tipos de comercio
A un nivel global, el comercio puede dividirse en dos tipologías:
- Comercio interior, aquel realizado entre entes que pertenecen a un mismo país.
- Comercio exterior, aquel en el que los entes involucrados se encuentran en países distintos.
Esta es, sin embargo, una categorización realmente simple que no se ajusta del todo a las complejidades propias del comercio. Así que es normal que, a la hora de la verdad, se hable de muchos tipos de comercios diferentes:
- Comercio mayorista o al por mayor: compra-venta en la que se intercambian grandes volúmenes de mercancía a precios reducidos. Normalmente, este tipo de comercio está destinado a revendedores que colocarán la mercancía en el sector minorista con el objetivo de obtener un beneficio.
- Comercio minorista o al por menor: compra-venta de mercancía a escala pequeña. Normalmente es el intercambio que va dirigido al consumidor final.
- B2B (business to business): compra-venta realizada de empresa a empresa. Se refiere a un tipo de comercio corporativo que maneja grandes cantidades de mercancía que se traspasa desde un proveedor a un cliente.
- B2C (business to consumer): compra-venta realizada de empresa a consumidor. Es el comercio directo entre una empresa y el consumidor final.
- C2B (consumer to business): compra-venta de mercancía de un consumidor (profesional) a una empresa. Vendría a ser, por ejemplo un artista que vende sus obras a un banco de imágenes.
- C2C (consumer to consumer): compra-venta de consumidor a consumidor, entre individuos. Se refiere tanto a bienes usados como nuevos, y concierne al comercio en el que un profesional vende directamente su producto (una artesanía, por ejemplo) al consumidor final.
- Comercio de Servicios: compra-venta de servicios profesionales como, por ejemplo, consultorías, atención médica, servicios financieros, etc.
Comercio electrónico
El comercio electrónico (o e-commerce) se refiere al acto de compra-venta de bienes y servicios que se realiza a través de internet o de cualquier otro medio electrónico. Esto significa que todas las transacciones se realizan de forma completamente digital y, por lo tanto, no es necesario que el vendedor tenga una tienda o espacio físico en el que realizar el intercambio. Probablemente en esta facilidad resida el secreto del crecimiento significativo que ha vivido en los últimos años coincidiendo con los avances de la tecnología.
Este tipo de comercio se desarrolla en plataformas online en las que los vendedores pueden exponer sus productos o servicios. Existen e-commerce para todo tipo de intercambios, desde bienes físicos (ropa, electrónica, coches, muebles, alimentos, etc.) hasta servicios digitales (streaming de contenido, software, consultoría, etc.). El consumidor puede abonar las compras con una gran variedad de métodos de pago que va desde las tarjetas bancarias a las pasarelas de pago y, en ocasiones, incluso transferencias bancarias.
Esta información de pago suele cifrarse para garantizar la seguridad de la operación. Al fin y al cabo, la seguridad es un factor fundamental en el comercio electrónico, ya que por ambas partes existe una necesidad de proteger toda la información financiera y personal relativa a la transacción. Para velar por la seguridad, los e-commerces suelen optar por medidas como el cifrado de datos o la autenticación de dos factores.
La entrega y logística es una parte importante del comercio electrónico que no siempre existe en una compra tradicional. Un e-commerce siempre deberá disponer de un sistema para entregar sus productos a través de servicios diversos de correos y mensajería. Hay comercios que incluso ofrecen entrega rápida para convencer al cliente potencial.
Una peculiaridad interesante del comercio electrónico es que la mayor parte de plataformas de e-commerce permiten que los usuarios dejen comentarios y reseñas sobre los bienes o servicios adquiridos. Estas opiniones se han convertido en una ayuda de vital importancia para otros consumidores a la hora de sopesar una decisión de compra en línea.
Comercio exterior
Dentro de todos estos tipos de comercio, existe uno que merece ser tratado en profundidad debido a su alta relevancia: el comercio exterior, también conocido como comercio internacional. Es una parte imprescindible de la economía global y su impacto incide directamente en la prosperidad económica tanto a nivel nacional como global.
Existen diferentes conceptos que son de vital importancia a la hora de entender cómo funciona el comercio exterior:
- Exportación: venta de productos y servicios producidos en un país a consumidores y/o empresas de otro país. Las exportaciones suelen ser una importante fuente de ingresos para la economía de un país.
- Importación: compra de productos y servicios producidos en otro país por parte de los consumidores y/o empresas de un país. Las importaciones permiten a un país acceder a productos y servicios que pueden ser difíciles de obtener o producir en su propio territorio. Suele incluir bienes de consumo, materias primas, maquinaria, etc.
- Balanza comercial: métrica que se usa para evaluar la salud económica de un territorio en términos de comercio exterior. Se calcula estableciendo la diferencia entre el valor de lo exportado y lo importado. Un superávit comercial significa que el país exporta más que importa, y un déficit comercial indica que el país importa más de lo que exporta.
- Aranceles y barreras comerciales. Cada gobierno es libre de aplicar los aranceles (impuestos) y establecer las barreras comerciales que crea necesarios para regular el comercio exterior. Estas medidas suelen tener como objetivo la protección de la producción local, la generación de ingresos fiscales o la promoción de objetivos económicos y políticos concretos.
- Acuerdos comerciales. Es común que los países negocien acuerdos comerciales bilaterales o multilaterales con los que estimular el comercio exterior. Estos acuerdos pueden pasar por la reducción de los aranceles, la eliminación de las barreras comerciales o el establecimiento de reglas comunes que beneficien tanto a las empresas como a los consumidores de los países implicados.
- Ventajas comparativas. Esta teoría desarrollada por el economista David Ricardo establece que los países pueden obtener beneficio al especializarse en la producción de bienes o servicios sobre los que tienen una ventaja comparativa (es decir: su producción es más ventajosa gracias a la coyuntura propia del territorio) para su comercio con otros lugares en los que su producción no es tan eficiente.
- Globalización: interconexión al alza entre las economías y sociedades de todo el mundo. La globalización va pareja a un aumento del comercio internacional, lo que supone una mayor oportunidad económica y cultural para todos los países. A su vez, también implica desafíos a nivel de competencia y regulación.
Comercio justo
En los últimos años, el comercio justo se ha convertido en una de las grandes preocupaciones de la economía mundial. Al fin y al cabo, este enfoque ético vela por la creación de condiciones justas y equitativas para los productores, especialmente para los territorios en vías de desarrollo. Entre esas condiciones está la garantía de salarios justos que cubran las necesidades básicas, la lucha por erradicar el trabajo infantil o la promoción de condiciones de trabajo dignas y seguras.
Otra de las grandes preocupaciones del comercio justo es el desarrollo sostenible, para lo que intenta crear dinámicas de producción que reduzcan el impacto ambiental. También lucha por la transparencia de las transacciones entre productores y compradores, además de crear un espacio de empoderamiento para las comunidades productoras en el que se fomente la participación y las decisiones colectivas.
Al fin y al cabo, puede decirse que el comercio justo fomenta la cultura local y vela por un mercado de precios mínimos garantizados. Para conseguirlo, promueve etiquetas y certificaciones que indiquen el cumplimiento con los estándares de este enfoque.
- Wikipedia
- Economipedia
- Definicion.de