Tres lecciones para cambiar tu mentalidad de emprendedora a empresaria

Txell Costa es consultora empresarial, conferenciante y profesora universitaria. Txell participó en StrongHer, un evento organizado por Qonto para impulsar el emprendimiento femenino en motivo del Día de la Mujer Emprendedora. En su workshop «Mentalidad de emprendedora a empresaria» dio mucho contenido de valor, que ahora comparte en nuestro blog.

Emprender hoy puede parecer un poco más fácil porque contamos con algo que los emprendedores no tenían en el pasado: Internet. Ahora bien, hay mucha información en la red y cada uno dice cosas distintas. Entonces, ¿dónde se puede realmente consultar? Hacer negocios rentables y «que sienten bien» sigue siendo todo un desafío.

Contar con una visión 360 te hará ahorrar dinero, tiempo y posibles errores. Todo, con una visión humanista, para que tengas un negocio que te impulse.

Y para eso el primer paso es contar con una mentalidad adecuada. La buena noticia es que eso se puede entrenar y mejorar día a día. Voy a darte diferentes consejos para cambiar este mindset.

En España de media una empresa no es rentable hasta los dos años de su puesta en funcionamiento. Y en este artículo vamos a aprender a no paralizarnos por análisis. ¿Cómo preparar la mente para este desafío? Pues yo recomiendo pensar en grande, vender cuanto antes y ser estratégica desde el comienzo.

Nada mejor que pasar a la acción para vivir de manera coherente con esta mentalidad. Y existen todo tipo de datos de referencia para saber si vamos por el buen camino. Establecer metas claras desde el principio es fundamental. Para ello, debes preguntarte cuántos servicios necesito vender, cuántos contactos online necesito hacer para conseguir esta cifra y cómo los captaré.

Con esto en claro, pasemos a las lecciones de mentalidad que te deben acompañar en tu aventura empresarial para interactuar con tu audiencia, especialmente en redes sociales, donde la comunicación es esencial.

Uno de los básicos para establecer metas financieras realistas es contar con una contabilidad analítica separada por líneas de negocio y público objetivo, para tener claro qué vender (qué te da más margen) y qué tipo de cliente.

Otro elemento fundamental es una red de contactos sólida. Para ello, debes preguntarte qué tipo de cliente tienes y cuál quieres.

Necesitas filtrar cada tipo de cliente bien a través de distintos sistemas como formularios o registros. Así sabrás si merece la pena dedicar tiempo y esfuerzo a ciertas audiencias. Quédate con los clientes que te interesan en base al retorno de la inversión y al retorno emocional. Hay clientes que por mucho que paguen, no merecen la pena.

Necesitas filtrar bien (formularios, copy…) antes de dedicar un minuto a un contacto. Para ello, establece procesos bien estudiados en base a cada problema ideal (el concepto «target ideal» queda corto).

No todos los contactos ni todos los compradores aportan el mismo valor. Ni tardan lo mismo en comprar. El marketing y la atención al cliente deben ser proporcionales al margen.

Cosas que debes tener en cuenta para mantener tu visión de negocio clara y firme:

• Mantén la visión: cuáles son las metas que planteas para tu negocio, a dónde quieres llegar, cuál es tu propuesta de valor con el público y el planeta.
• Define bien tu misión: ¿en quién te tienes que convertir y con quién te tienes que relacionar para conseguir lo que quieres?

Hacer que tu negocio sea rentable y perdure en el tiempo necesita adaptación y dinamismo. Los negocios perdurables diversifican, innovan, se adaptan al cambio y están profesionalizados.

Espero que te haya resultado inspiradora esta vista de pájaro por los pilares de una empresa. Y recuerda que soluciones financieras como Qonto pueden acompañarte y simplificarte la comprensión de tus finanzas en el camino de emprender.