Cómo transformará la IA las relaciones con los clientes en las asesorías

Para las asesorías contables y fiscales, la inteligencia artificial no es solo una revolución tecnológica. Al transformar la forma en que trabajan los asesores y los contables, la IA no solo abrirá una nueva era en las relaciones con los clientes, sino que también proporcionará las herramientas para llevar las relaciones con los clientes a una nueva dimensión.

La llegada de la IA marca un punto de inflexión decisivo para la profesión contable. La integración gradual de la automatización de los procesos contables y los sistemas inteligentes de análisis de datos ya ha comenzado a transformar radicalmente las operaciones diarias de las asesorías y consultoras de contabilidad.

Estas herramientas de inteligencia artificial permitirán a los asesores y contables reducir significativamente el tiempo dedicado a tareas repetitivas. La automatización de la entrada de datos no solo aumentará la productividad, sino que también reducirá el riesgo de errores humanos, garantizando una mayor precisión en los datos financieros. Además, el análisis avanzado de datos proporcionará a los asesores información valiosa sobre las tendencias financieras y el comportamiento de los clientes. Las empresas podrán ofrecer un asesoramiento más relevante y personalizado, basado en análisis detallados y previsiones financieras, lo que reforzará la confianza y la satisfacción de los clientes.

Por lo tanto, la IA promoverá la aparición de un nuevo enfoque de las relaciones con los clientes. Pero también proporcionará a las firmas de contabilidad herramientas para implementarlo. «Dentro de la asesoría, confiamos en las herramientas digitales para responder mejor a nuestros clientes y mejorar su experiencia», Así lo explica John Lévy, asesor contable (firma Trevys Advisory).

La inteligencia artificial ya permite desplegar los siguientes usos:

• Chatbots que responden automáticamente a las solicitudes más básicas de los clientes (una solicitud de cita, por ejemplo, o una pregunta sobre la fecha límite para pagar el IVA).
  
  
• Herramientas para priorizar las solicitudes entrantes y redirigirlas a los contactos internos correctos.
  
  
• Herramientas para el análisis semántico de las opiniones de los clientes enviadas en línea.

A medio plazo, las relaciones con los clientes también se beneficiarán de las nuevas aplicaciones de IA:

• Herramientas para responder automáticamente a las preguntas de los clientes extrayendo la información necesaria directamente del archivo.
  
  
• Un análisis en profundidad de las necesidades de los clientes para ofrecerles un soporte más personalizado que cumpla con sus expectativas. Por ejemplo, la IA puede analizar los correos electrónicos de un cliente para detectar si se le pueden ofrecer nuevos servicios.

‍«La tecnología ya permite a los clientes de la firma hacer preguntas en lenguaje natural. De este modo, la IA puede encontrar los elementos de respuesta haciendo solicitudes en los archivos». explica Vincent Bonnivard, líder del equipo de IA en Probayes.

Todas estas aplicaciones de la inteligencia artificial son prometedoras para las asesorías de contabilidad. Pero también plantean cuestiones que deben abordarse antes de que despegue en la profesión una nueva relación con los clientes basada en la IA.

Para ser eficaces, los modelos de IA deben entrenarse con datos de calidad. «Sin embargo, el uso que hacen de estos datos las herramientas de inteligencia artificial a veces sigue siendo opaco. ¿A quién pueden acceder? ¿Dónde están guardados? Estas son preguntas que las firmas de contabilidad que utilizan estos modelos deben poder responder», explica Vincent Bonnivard. De hecho, se trata de garantizar la confidencialidad de los datos de los clientes y de cumplir con los requisitos reglamentarios en términos de secreto profesional o de cumplimiento del RGPD.

Quien dice nuevos usos en la empresa, a menudo se refiere a capacitar a los empleados. Con la IA, este desafío es particularmente importante. De hecho, será necesario no solo capacitar a los equipos en las nuevas herramientas que se utilizarán para aprovechar el potencial de la IA, sino también permitir a los empleados evolucionar hacia nuevas misiones. Pasar del registro contable al servicio de atención al cliente no es algo que pueda improvisarse. Por lo tanto, será necesario que las empresas se embarquen en un auténtico proceso de gestión del cambio y pongan en práctica planes ambiciosos para la adquisición de competencias.

‍Si la IA es una verdadera revolución tecnológica, el aspecto humano prevalecerá en la evolución de las firmas de contabilidad. Sea cual sea el nivel de rendimiento de las herramientas, siempre serán las personas del equipo quienes deberán validar su correcto funcionamiento y poder verificar los resultados producidos por los algoritmos.